domingo, 14 de septiembre de 2014

La Universidad

Mañana inicia la 3 semana de la universidad y admito que ya deseo darme por vencida, estoy un tanto cansada, el horario me pesa bastante, y acaba moliendome, no logro concentrarme del todo en lo que leo, pero realmente me gusta la carrera. El problema aquí es que me siento realmente sola, como nunca lo eh estado, cada día es más evidente que soy hija única y eso me hace sentir más sola, la gente que realmente me escucha esta haciendo su vida, y estoy feliz por ellos, pero los extraño, pero luego me aburren y ya no quiero saber de ellos. (¿Quién me entiende?).

Me falta motivación de hacer todo posible, de disfrutarlo, de divertirme, de gozar cada día y de morir en la raya, no me siento motivada, y es que a nadie le importa como me sienta, pero así es la vida. 

Extraño la preparatoria como nunca antes, extraño los abrazos cálidos de todos cada día, sus risas, nuestros chistes.

Creí que al entrar a la universidad todo estaría más definido, pero es mentira. 
¡TODO ABSOLUTAMENTE SE PONE PEOR!
No sé a donde voy, ni que voy hacer, ni de que voy a vivir, y no quiero ser un titulo.

Luego me vienen ideas como dejar la universidad, y pienso en todo aquellos que no entran a la universidad y darían la mitad de ser yo y estar sentada en la silla donde estoy, y estar desvelándose por las tareas, también pienso en todos aquellos compañeros que viven solos, y están extrañando a sus padres, pero van a la universidad con una cara de felicidad y no se quejan ni se ponen de mariquitas como yo.