Lo que pasa con el dolor es que exige ser sentido.
Pero pasa lo mismo con el amor.
Ambos exigen sentirlos, pero aquí la diferencia es que uno se siente bien y el otro mal y hasta vació. A veces siento que evitamos el dolor de manera exagerada, pero debemos aceptarlo y hasta quererlo pero de una forma sana, por que tarde o temprano se irá el sentimiento y regresaremos a esa paz que tanto disfrutamos.
El problema con el humano es que idealizan la FELICIDAD como forma de vida y solo van como borregos buscando la Felicidad sin plantearse que es realmente la palabra felicidad . Aquí no les diré que es la felicidad, pues creo que así como las perspectivas y opiniones tan diversas entre toda la gente. Así es la felicidad... ¡Diferente para todos!. Pero a lo que realmente quiero llegar es que la vida es una gama de tonalidades si quieren podemos ponerlo así...
Negro= Tristeza. Blanco= Felicidad
¿Pero y que pasa con toda la gama de grises?
No elegí la idea de poner la paleta de colores.
Solo quiero entender por que de pronto nos obligamos a no sentirnos tristes y deprimidos, si es normal. Aceptar que nos sentimos es mejor pues es más sencillo no sentirnos tan montañas rusas andantes. A veces por disfrazar la tristeza a felicidad, hacemos cosas de gente feliz y nunca logramos superar ese altibajo por que estamos "FELICES" y después de un tiempo de felicidad fingida, almacenamos mucha trastesa y es peor.
No quiero decir que la gente deba deprimirse por un año, pero si debemos sentirlo. Nadie quiere al dolor pero es un sentimiento que te ayuda a impulsarte a aprender muchas cosas, y lo más importante a crecer como persona haciéndote más fuerte y aprueba de balas.
Berenice Briseño.
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